
Fuera, metal, adentro, es decir en el intradós, madera laminar. Todo con una estructura de sustentación curvilínea que define una forma arquitectónica integrada en el paisaje urbano y natural circunstante. En Caldonazzo, en la provincia de Trento, la ampliación de una estación de servicio de combustibles, con bar comedor, se ha ampliado en las volumetrías para hospedar también una actividad de taller mecánico, con función de centro de revisión para los coches; además, adyacente al mismo se ha realizado también un nuevo edificio, que hospeda la vivienda del propietario y un depósito. La estructura elaborada recupera las tipologías tradicionales de construcción, enriqueciéndolas con una cubierta curvilínea elaborada y de altas prestaciones: un paquete que sale de las vigas armadas de madera laminar (reforzadas con un armazón con una o varias barras metálicas en toda la longitud) y llega a cerrar con las hojas metálicas de chapa grecada, equipadas con una capa aislante termoacústica. El proyecto es de la sociedad de ingeniería Armalam de Pergine Valsugana (TRENTO), de los proyectistas Claudio Cattich y Luca Gottardi. Se ha encargado de la construcción la empresa Ires Costruzioni de Trento.
El edificio se ha estructurado según varias zonas: la zona relativa al taller está constituida por vigas curvas de sección doble, curvadas hacia arriba, con una longitud de carga de unos 12 m y con vigas colocadas en dirección ortogonal, con un paso de 1 m. Luego hay la zona colocada a la altura de la vivienda, donde se han utilizado vigas de sección dobles a que se ha colgado el techo con tirantes de acero; por lo tanto, estas vigas sustentan tanto el tejado como el techo, colgado en la estructura principal superior. En esta estructura se apoya la estratigrafía del paquete de cobertura, constituido – desde el interior hasta el exterior – por listones de abeto de 2 cm de espesor por una capa de freno vapor, por el aislante, por una vaina de impermeabilización y por el revestimiento de cobertura de chapas grecadas de aluminio con capa de poliuretano integrado. El resto de las estructuras es de cemento armado con taponamientos convencionales.
La cubierta

La elección de revestir el lado externo de la cubierta con chapas de aluminio de la línea Tek 28 de Alubel se debe a las características del producto, que permiten elevar resistencia, confort y larga duración del producto.
De hecho, se habla de ventajas como: reducción del ruido de impacto directo de lluvia y granizo, con el mejoramiento del confort acústico interno; reducción del efecto condensación con la circulación del aire debajo del revestimiento que preserva el aislamiento térmico de los estancamientos de humedad y condensación, sobre todo durante el invierno, y del sobrecalentamiento interno de los locales debido al efecto del sol durante los meses del verano (efecto tejado caliente-ventilado); óptima la transitabilidad en caso de mantenimiento sin abolladuras;
reducción de los daños debidos al granizo; eliminación de los puentes térmicos con el aislamiento del intradós de la chapa y de los riesgos de corrosión galvánica del material causada por el contacto entre metales diferentes, separados entre ellos por la capa de poliuretano.
En un mes de tiempo, las chapas grecadas y aisladas termoacústicamente Alubel Tek28 han sido colocadas por equipos constituidos por dos operadores, simplemente posicionando el producto y engrampándolo, con un proceso de colocación rápido y limpio, que ha explotado las propiedades del producto.
Las prestaciones

La rigidez de cada chapa Alubel Tek28, con la posibilidad de transitar arriba de la misma en caso de mantenimiento, se garantiza gracias a la naturaleza compuesta del producto, con la integración entre la chapa y el aislante; una característica de resistencia que no ha perjudicado la posibilidad de trabajar las chapas con curvatura por golpeo para alcanzar la curvadura apta a seguir la disposición flotante de la estructura, situada abajo, de madera laminar, garantizando al mismo tiempo lo unitario de la chapa aislante en cada punto del revestimiento. El otro factor clave en la elección y en la aplicación del sistema Tek28 es relativo a las propiedades fonoaislantes, especialmente importantes para los espacios destinados a la vivienda.
La estructura elástica de celdas del poliuretano absorbe y reduce fuertemente los ruidos aéreos, a partir de los causados por el impacto en la cubierta de lluvia y granizo, mientras que el acoplamiento de materiales y espesores diferentes (metal y poliuretano) logra limitar la propagación de las vibraciones causadas por los ruidos y las transforma en un aumento de calor infinitesimal, listo para ser disipado por el sistema.
